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Dolor e hinchazón abdominal, ¿Colon irritable?

09.05.2021

El síndrome del intestino irritable (SII), más comúnmente conocido como colon irritable, es un cuadro crónico y recidivante caracterizado por la existencia de dolor abdominal y/o cambios en el ritmo intestinal, acompañados o no de una sensación de distensión abdominal, sin que se demuestre una alteración en la morfología o en el metabolismo intestinales, ni causas infecciosas que lo justifiquen. También se ha denominado colitis nerviosa, colitis espástica o colon espástico. 

Síntomas

Suele aparecer antes de los 35 años, disminuyendo su incidencia a partir de los 60 años. Es más frecuente en mujeres que en hombres y en aquellas personas con otras patologías digestivas funcionales.

Los síntomas digestivos propios son el dolor e hinchazón abdominal, junto con la alteración del ritmo intestinal. El dolor abdominal suele ser difuso o localizado, tipo cólico, opresivo o punzante, leve o moderado de intensidad, con una duración inferior a dos horas, que alivia tras la defecación y que suele respetar el sueño. El inicio o la presencia de dolor abdominal se asocia habitualmente con deseos de defecar o cambios en la frecuencia o consistencia de las deposiciones y, frecuentemente, el paciente relaciona su comienzo con la ingesta de algún alimento. 

Las alteraciones del ritmo intestinal pueden manifestarse con predominio del estreñimiento o la diarrea, o de forma alterna diarrea-estreñimiento. La distensión abdominal y el meteorismo se desarrollan progresivamente a lo largo del día y son referidas como "exceso de gases". Son frecuentes la saciedad precoz tras la ingesta, las nauseas, los vómitos y el ardor torácico. 

Otros síntomas son la sensación de evacuación incompleta y la presencia de moco en las deposiciones.

Prevención

Una alimentación adecuada puede ayudar a prevenir futuros problemas de colon irritable. Se aconseja que las comidas sean pobres en grasas y ricas en proteínas y fibras. Así como evitar aquellos alimentos que provoquen una mayor cantidad de gases. 

Consumir abundante agua, ya que puede ayudar a reducir la irritación, lo recomendable sería entre un litro y medio y dos litros al día. Se recomienda también intentar comer todos los días a la misma hora, así como regularizar las horas de las deposiciones. 

Hacer ejercicio de forma regular también es recomendable, al producir una mejora de la movilidad intestinal. Así como evitar situaciones que generen estrés o ansiedad, lo que también puede ayudar a evitar una irritación.

Recomendaciones

Lactoflora IBSolución es una combinación de probióticos y vitamina D3, desarrollada específicamente para persona con disconfort intestinal. Además, contribuye al funcionamiento normal de sistema inmunitario. 

Beneficios de los probióticos en el síndrome del intestino irritable:

  • Aumentan la producción de moco e incrementan la motilidad intestinal
  • Potencian la función defensiva de la barrera intestinal
  • Ayudan a reducir la inflamación inestinal
  • Ayudan a reducir la hipersensibilidad visceral
  • Restablecen el equilibrio natural de la flora bacteriana

Forma de uso: un sobre al día, durante un mínimo de 6 semanas; tomar preferiblemente después del desayuno; vaciar el contenido del sobre directamente en la boca o disolver con 200 ml de agua fría. 


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